Hoy en Minipisos y Espacios Pequeños te contamos como una cabaña de 48m² puede convertirse en la casa de playa que siempre quisiste tener.
El suelo del salón desde el que se visualizan unas vistas envidiables, está revestido con listones de madera en color blanco, pintados a mano, con un toque desgastado. El columpio, da sin lugar a dudas, el toque personal y carismático que se merece esta estancia de la casa.
La cocina se ha amueblado con muebles a medida, diseño de Humbert & Poyet, y encimera de mármol de Carrara. El fregadero es un diseño de los arquitectos. Grifos de Lefroy & Brooks.
Los ventanales abatibles alrededor del comedor, crean sensación de amplitud y dejan entrar la luminosidad que el mar nos regala en este coqueto espacio.
Si continuamos por las escaleras que encontramos al lado de la cocina, se puede acceder a las habitaciones, todas ellas con listones pintados a mano, al igual que en el salón exterior y una combinación perfecta entre el blanco y las telas étnicas.
En las habitaciones todas las camas están elevadas y en la parte inferior disponen de un espacio de almacenaje en el que poder guardar ropa de cama, ropa de otra temporada...cada detalle y parte aprovechable es clave en estos minipisos.
Finalizamos con el baño, pintado en blanco, con una lámpara de pared y un espejo con toque bohemio en dorado envejecido y un precioso ventanal con persianas en madera realizadas a medida.
Sin duda, una cabaña donde convertir tu día a día en unas eternas vacaciones.
En el próximo post... 'Las minicasas arrasan en Estados Unidos'
¡No te lo pierdas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario