Si un piso pequeño se amuebla en exceso y la decoración es recargada, lo convertiremos en un espacio aún más pequeño y agobiante. La decoración de los espacios pequeños debe ser liviana y a la vez funcional. El secreto está en tener lo básico y necesario.
Debemos analizar muy bien nuestras necesidades, no acumular (ropa, libros, objetos decorativos... ) y mantener un orden y una limpieza. Es importante también elegir un tamaño adecuado del mobiliario, y que este tenga varias funciones.
En las habitaciones de este minipiso, no falta de nada, salón-comedor pequeño de forma alargada y muy bien resuelto. Lo mismo ocurre en la cocina, que incluso tiene espacio para una mesa extensible. El dormitorio es pequeño pero muy acogedor, decorado con un bonito papel de pared floral.
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